Los niños pasan por varias etapas en el desarrollo del cerebro a medida que crecen, y sus dibujos pueden desarrollarse y madurar junto con ello. Sin embargo, la mayoría de los niños, a menos que se les enseñe a dibujar, pueden llegar a ser desalentados porque sus dibujos no parecen realistas, y con frecuencia se dan por vencidos. Pero en este post te dejaremos algunos métodos para ayudar a tu pequeño a aprender a dibujar.
Usar formas geométricas
Los niños aprenden formas geométricas temprano, tales como círculos, rectángulos, triángulos, etc. Por ejemplo, la cabeza de un oso de peluche se compone principalmente de formas circulares. Al niño se le puede demostrar cómo dibujar un gran círculo para la cabeza del oso y dos semicírculos para los oídos. Un círculo más pequeño en la parte inferior de la cabeza del oso hace la parte de la cara y la nariz del oso. Con instrucciones paso a paso de este tipo, un niño tendrá éxito en la elaboración de una figura más realista.
Poner la imagen al revés
Gira la imagen al revés. Los niños, como los adultos, pueden aprender a "ver" de manera diferente, y luego dibujar diferente.
Una técnica para los niños es girar una fotografía u otro objeto al revés, de modo que en lugar de ver una nariz y dibujar un objeto triangular que ellos piensan que es una nariz, un niño será más capaz de ver la imagen como una serie de líneas y dibujar lo que ve, no lo que piensa que debería estar allí.
Sentir el objeto
Dibujar a ciegas
female line art image by Allyson Ricketts from Fotolia.com
Haz que el niño intente dibujar algo en una sola línea, sin mirarlo. Si es demasiado tentador mirar, coloca el pedazo de papel y un lápiz debajo de una repisa o en un taburete debajo de la mesa. Coloca un objeto como un florero o un zapato sobre la mesa, y ayuda al niño a poner el lápiz en el papel en un punto de partida. Enséñale a pensar en la forma en su mente y tratar de dibujar sin levantar el lápiz del papel. Si accidentalmente lo hace, se puede mirar sólo el tiempo suficiente para poner la punta de un lápiz de nuevo en el papel. Esto ayuda al niño a cambiar el modo de pensar de nuevo, por lo que no se basa en sus propios ojos fijos en el papel, sino en la sensación de la forma como se mueve el lápiz.
Dibujos de corto tiempo
Anima a los niños a sentir un objeto antes de dibujarlo. Por ejemplo, si el niño quiere dibujar una flor, pídele que use su dedo índice para "rastrear" el contorno de la misma flor, y sentir cómo va su mano. Puedes usar tu dedo sobre el suyo para ayudar a guiarlo en los bordes del objeto. A continuación, invítalo a practicar poniendo esas curvas que se sentía en el papel con el lápiz. Después de mirar la flor, sentirá de nuevo en su mente mientras dibuja.
Dibujar a ciegas
Dibujos breves ayudan a un niño a simplificar las líneas dibujadas y concentrarse en formas básicas. Haz que una persona se siente como modelo, o arma un arreglo de objetos. Dile al niño que para la primer práctica de dibujo, tiene 15 minutos para dibujar lo que ve. Cuando se acabe el tiempo, dale un pedazo de papel en blanco y dile que esta vez él dibujará lo mismo, pero sólo contará con siete minutos para hacerlo. Una vez más, después de que el tiempo haya terminado, dale una hoja más de papel y dile que tiene dos minutos para dibujar lo que ve. Por lo general, en el momento en que el niño está en el dibujo de dos minutos, se concentra en líneas muy simples y no trata de insertar los detalles, que a menudo lo pueden desviar de terminar un dibujo.
Dibujos de corto tiempo
Dibujos breves ayudan a un niño a simplificar las líneas dibujadas y concentrarse en formas básicas. Haz que una persona se siente como modelo, o arma un arreglo de objetos. Dile al niño que para la primer práctica de dibujo, tiene 15 minutos para dibujar lo que ve. Cuando se acabe el tiempo, dale un pedazo de papel en blanco y dile que esta vez él dibujará lo mismo, pero sólo contará con siete minutos para hacerlo. Una vez más, después de que el tiempo haya terminado, dale una hoja más de papel y dile que tiene dos minutos para dibujar lo que ve. Por lo general, en el momento en que el niño está en el dibujo de dos minutos, se concentra en líneas muy simples y no trata de insertar los detalles, que a menudo lo pueden desviar de terminar un dibujo.
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